Una escisión es un proceso legal que consiste en la división de una sociedad en más de una o dos sociedades, separando sus activos, pasivos y capital social.

Las tipologías de escisiones más comunes son:

Escisión total: consiste en la división de una sociedad en dos o más bloques, donde la sociedad que se escinde desaparece y los distintos bloques en los que se ha divido su patrimonio se aportan a dos o más sociedades llamadas beneficiarias.

Escisión parcial: traspaso en bloque del patrimonio de una sociedad, a una o varias sociedades de nueva creación o ya existentes, recibiendo los socios de la sociedad que se escinde un número de acciones, participaciones proporcionales a su respectiva participación en la sociedad que se escinde y reduciendo ésta el capital social en la cuantía necesaria.

Segregación: consiste en el traspaso en bloque por sucesión universal de una o varias partes del patrimonio de una sociedad, cada una de las cuales forme una unidad económica, a una o varias sociedades, recibiendo a cambio la sociedad segregada acciones, participaciones o cuotas de las sociedades beneficiarias.

Es necesario redactar un proyecto común de escisión entre las sociedades participantes, y depositarlo en el Registro Mercantil y realizar la correspondiente publicación en el diario de mayor circulación de la provincia. En este documento se debe incluir información relevante como los datos identificadores y registrales de las sociedades participantes, los estatutos de la nueva sociedad resultante de la escisión, los efectos y consecuencias generadas por la escisión, información sobre la valoración del patrimonio de las sociedades, así como, la fecha en las que la escisión tendrá efectos contables.

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Joan Carles Roig

Economista